Ana Estela Diloné
SANTIAGO. El expelotero de Grandes Ligas, Miguel (Guelo) Diloné, afirmó ayer que cuando acude a los tribunales de esta ciudad en busca de justicia por el asesinato de su madre, ocurrida en septiembre del 2012, siente ser el agresor y no el agraviado, en vista de la forma en que el caso es manejado por el tribunal que lo conoce.
Diloné se mostró preocupado de que los culpables del asesinato de su madre Ana Estela Diloné sean puestos en libertad en el juicio de fondo que iniciará el próximo lunes, en el Segundo Tribunal Colegiado de esta ciuda.
Los principales acusados son Kenny Miguel Rodríguez Durán, Andrés Martínez García (El Mono) y Marcos Joel Peña Durán. Además de éstos, originalmente también fueron detenidos e investigados Allendy Balbuena, Carlitos Steven, Luís Dalenio Vargas Lantigua y Estanly Ariel Méndez Castillo, contra quienes no se levantaron cargos. El crimen fue cometido el 8 de septiembre del 2012.
La señora Diloné fue estrangulada mientras dormía en su residencia, localizada en la esquina que forman las calles Anselmo Copello y Del Sol, del sector Hospedaje Yaque, de donde los delincuentes robaron joyas y dinero. “Cuando voy a la justicia, he sentido que soy yo el que ha hecho algo; me siento que no soy el agraviado, sino que fui el que hizo algo y tengo que buscar la forma de probarles a los jueces mi inocencia” expresó el exjugador de beisbol profesional.
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