Sus rostros hablaban por sí solos. La preocupación, ansiedad e incertidumbre era evidente en el rostro de los productores y exportadores agrícolas afectados por la veda impuesta por Estados Unidos y Haití a las frutas y vegetales dominicanos por la presencia de la Mosca del Mediterráneo en el país.
Ayer el ministro de Agricultura, Ángel Estévez, se reunió con los afectados, escuchó sus inquietudes y les presentó una serie de alternativas que pretende implementar, pero ellos no quedaron satisfechos y exigen que se implemente un plan de emergencia ante la “debacle” que se aproxima.
“Hay que buscar soluciones inmediatas, precisas. Este problema va a causar una debacle financiera en el sector productivo del país. Esto es una catástrofe para el sector agroexportador de frutas y vegetales. Las pérdidas que causará esta medida son incuantificables”, pronunció el senador de San José de Ocoa y presidente de la empresa Agroindustria Ocoeña, Carlos Castillo.
Castillo advirtió que esta medida de Estados Unidos tendrá un “efecto dominó” en toda la red de producción, porque los empleadores del sector se verán obligados a reducir sus nóminas, afectará a las fábricas de químicos y a los transportistas que movilizan más de cien contenedores semanales desde esa provincia sureña.
“Estamos hablando de algo de mucha envergadura. El sector está en un colapso y el Gobierno debería hacer un llamado de emergencia porque esta es una situación gravísima. Necesitamos una solución inmediata. Esto va a causar pérdidas millonarias a los productores y al mismo Estado. Hay que tratar esto con seriedad”, manifestó el legislador.
Castillo explicó que en San José de Ocoa hay más de dos millones y medio de invernaderos donde se producen grandes volúmenes de ajíes, tomates, aguacates y otros productos. Precisó que cada semana salen alrededor de 100 contenedores con fines de exportación y que actualmente tienen más de 150 furgones paralizados.
Se quejó de que “los dominicanos ponemos el candado después que nos roban” porque, a su juicio, el Ministerio de Agricultura había recibido la notificación de Estados Unidos desde octubre del año pasado e hizo caso omiso.
Asimismo, Raúl Gerónimo, en representación de los productores de aguacate detalló que este sector tiene alrededor de 15 millones de frutas estancadas. A esto se suman cerca de 30 furgones que estaban listos para salir y también están paralizados.
Indicó que si estos furgones no salen pronto las empresas exportadoras les devolverán la carga. Dijo que esto implicaría grandes pérdidas porque en Nueva York se planeaba vender la caja a 25 dólares y aquí no pasaría de ocho.
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