“El respeto de uno termina donde comienza el respeto del otro”, Bob Marley.
Si miras a tu alrededor te darás cuenta que todos somos diferentes, con una huella propia que nos hace únicos.
Lamentablemente, muchas veces, caemos en el error de querer forzar al otro a actuar según nuestros preceptos; olvidando que intentar cambiarlos no funciona y que donde termina mi autonomía comienza la del otro.
Ante este comportamiento es vital poner en practica el valor del respeto. Respetar a los demás es valorar lo que les hace diferentes, tomando en cuenta sus intereses, capacidades, limitaciones, preferencias y sentimientos.
Aplicar este valor es un gran reto porque
implica tener la grandeza de considerar a las otras personas, entender que tienen visiones diferentes tan válidas como las propias.
Tenemos que tener claro que no hay respeto sin generosidad, humildad, agradecimiento, tolerancia y empatía.
Nuestra responsabilidad es centrarnos
en nosotros y cambiar cómo pensamos, nos sentimos y respondemos ante el
comportamiento de los demás.
Recomendaciones para cultivar el respeto a los demás:
No confundir el respeto con el miedo.
Cultivar el valor de la escucha.
Tomar en cuenta los sentimientos de los demás.
Pensar antes de emitir un juicio.
Compartir opinión cuando se nos pida.
No difundir chismes y rumores.
Practicar la empatía.
Disculparnos cuando nos equivoquemos.
Desarrollar la asertividad y agradecimiento.
Cumplir las leyes y normas.
Cuidar el medio ambiente y espacios comunes.
Por último y no menos importante, respetarnos nosotros mismos.
Recuerda, es imposible vivir en un entorno sano sin respeto.
No te dejes para después amor es la respuesta.
Ana Carina Castillo | [email protected]
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